lunes, 21 de mayo de 2012

Vuelta a la maleta y a las camisas planchadas. El taxi que espera en la puerta. La primera noche en la casa sin tí, y tú volando el cielo, sobrevolando los tejados y los ruidos callejeros. 


Volver a acostumbrarse a nadar sin manguitos, a mantener el equilibrio en la cuerda que tiembla. Domingos sin tí. 


Volverás, con tus rizos más crecidos y tu barba distinta, cansado tras el vuelo largo. Luego, la cerveza en casa, las confidencias y tu olor de nuevo en la cama.


Acostumbrarse cuesta, a este junio que empezará sin tí.

3 comentarios:

Sístole dijo...

Ahí estaremos. Como siempre.
:)

Abigail LT dijo...

Mucho ánimo y mucha fuerza!

Los reencuentros son tan especiales!

xxxx

Unknown dijo...

Cada vez que me toca me cuesta más. No quiero separarme de ti y siempre me digo: esta va a ser la última. Pero como sabes, no lo será... No me gusta nada de nada dejarte sola, pero el deber nos llama y a algunos nos lleva muy muy lejos. Estaré al tanto de tus cosas, lo más cerca posible y siempre, siempre, siempre, pensando en ti.

Te amo.